domingo, 2 de noviembre de 2014

CONFERENCIA DE JAIRO RESTREPO

Como me pareció una exposición brillante, valiente y muy clara, decidí tomarme la molestia de transcribirla. También puede, quien lo desee, escurcharla siguiendo el enlace.

CONFERENCIA DE JAIRO RESTREPO EN LA FERIA DE ALIMENTACIÓN Y SALUD, EL 4 Y 5 DE OCTUBRE DE 2014 EN BALAGUER (LÉRIDA).
 
 

La Agricultura Orgánica (A.O.) no es una moda; es una nueva forma de ver la vida; una nueva forma de compartir; una nueva forma de construir humanidad; es una nueva forma de conquistar lo básico, la sensibilidad del corazón; es una nueva forma de rescatar las emociones para imprimir aquello que es básico, la fuerza y la vitalidad que es la vida.
Este movimiento debe ser vital en función de la interioridad del ser. Es tan vital la interioridad del ser que en él se centran nuevos dominios. Porque la totalidad externa del mundo, hoy en día, siento que está destruida. El ser humano, en su exterioridad, no consigue atar las relaciones entre las cosas. Éste ha sido el logro de la globalización.
El segundo paso de la destrucción del ser fuera de su tejido social, se lleva a cabo en el tejido agro-farmacéutico, que manipula todos los sistemas agroalimentarios y de insumos. Son cien empresas. Las cuales tienen sus sedes.
La destrucción de la totalidad interna del ser, está en camino y a esto debemos enfrentarnos; son nuevas luchas.
¿Cómo se domina y destruye la totalidad interior del ser que está siendo planificada y ejecutada a partir de un dominio de varios sistemas?
1.- Todos los venenos deben ser neurotóxicos.
¿Qué significa un alimento neurotóxico? La deficiencia de un elemento importante para completar el raciocinio y buen desarrollo cerebral; esos alimentos te niegan la integración de algunos minerales pasando a tener una deficiencia neuro-cerebral.
Muchos venenos tienen la función de provocar una neurotoxicidad por la presencia de otros elementos como el mercurio y el aluminio en semillas y elementos agroindustrializados, de forma intencional.
La destrucción de la interioridad del ser comienza también con que los alimentos provocan neurotoxicidad.
2.- Los alimentos deben provocar, también, un disturbio digestivo y dominar el sistema digestivo. Dominar el sistema digestivo es que los alimentos producen una esterilidad microbiológica. No producen una rehabilitación prebiótica ni probiótica. Los alimentos luchan, hoy, por esterilizar totalmente el tracto digestivo.
Cuando un alimento recorre 2.400 Km. para estar en oferta en un supermercado, deben conservarse. Y todo conservante es antidigestivo.
Ser antidigestivo es ir en contra de la capacidad biológica de los intestinos. Todos los conservantes provocan la parálisis de la actividad normal de la digestión.
3.- Un tercer principio básico de la dominación del ser humano a partir de la destrucción de la interioridad es que los alimentos deben de provocar una represión del sistema inmunológico. Hoy la inmunología es cada vez más un negocio.
Los niños ya tienen una sintomatología de ser cada vez menos resistentes a ciertas patologías.
¿En qué se fundamenta la represión del sistema inmunológico? Más del 80% de la soja que se produce en América Latina, viene con residuos de herbicidas para Europa. Ese herbicida es un inhibidor del sistema inmunológico a partir del bloqueo del químico en los humanos.
Otro de los esquemas de los alimentos que vienen siendo incorporados para debilitar al ser humano, es que los alimentos tienen una lectura de acomodación con el sistema sanguíneo.
En genética hay una expresión básica: "el medio hace la variedad". La sangre es una expresión de lo que comemos. Si lo que yo como no corresponde a mis necesidades, esa sangre es débil y pasa a tener problemas en la persona.
Otro sistema que está siendo reprimido es el sistema respiratorio. El sistema respiratorio aumenta las patologías, apareciendo los edemas en grandes cantidades, las fibrosis pulmonares, la parálisis de las pleuras, la elasticidad pulmonar desaparece.
En función del envenenamiento, no solo de la nicotina del cigarro, sino de los residuos del veneno con el que se trata el tabaco.
En Brasil, un cultivo de tabaco está recibiendo 28 aplicaciones de veneno donde hay 18 productos diferentes.
Estos residuos entran en combustión incompleta con la encendida del cigarro.
Hay otro sistema que es dominado a partir de los alimentos en el ser humano, es el sistema endocrino. Todas las personas tienen, hoy, problemas hormonales.
Otro elemento básico de la dominación del ser a partir de la alimentación es la fertilidad y la fecundidad.
En el momento en que el alimento pierde las características de un alimento originado a partir de la biología del suelo, él pierde también, las capacidades de generar gente con fertilidad. En la medida en que el suelo pierde la fertilidad, quien se alimenta de ese suelo que produce alimentos, es infertil. La infertilidad aumenta. En el momento en que el sistema agroindustrial me niega la capacidad de generar la vida y que los alimentos que consumo deben ser la prolongación de la vida, esa transformación de los minerales y esa conjugación que se da en el suelo, en el momento que se niega esto, estamos negando la fertilidad de la perpetuación..
En la medida que yo esterilizo el suelo, esterilizo la población que consume el alimento de ese suelo. Usted tiene veneno en el plato.
Finalmente, la dominación del sistema psíquico.
Europa está acobardada. Europa tiene miedo. La gobierna el miedo y los psicópatas.
Hoy, los países que visito de Europa, la palabra que predomina es la negación del ser. Cuando existe el gobierno y el imperio del miedo, se niega el ser, el estar y el bienestar.
Hoy, Europa, está acobardada.
Es importante estar atentos a todo esto. No podemos ser sometidos a nuevos sistemas de dominación imperial. Es necesario desatar ese grito y eso nos lo posibilita la propuesta de una agricultura totalmente diferente. Los venenos que contienen los alimentos, son venenos que siempre estuvieron relacionados con conquistas, con guerras, con hambre.
Los venenos y los insumos agropecuarios no tienen que ver nada con la prolongación de la vida y la autonomía de los campesinos.
Los venenos siempre fueron investigados para matar. Los venenos siempre fueron herramientas de conquista, de sometimiento. Hoy es el sometimiento indirecto, no de guerras y sí de los venenos en los alimentos.
Una persona que cocina una hortaliza puede estar generando con la físico-degradación del calor del cocimiento, tres posibilidades: una teratogénesis (Teratos: monstruo, Génesis: Origen o generación), una  mutagénesis (modificación del material genético), o la aparición de un cáncer.
¿Por qué? Porque cuando los alimentos se consumen, los venenos utilizados, un grupo llamado "ditiocarbamatos", al ser sometidos a un calentamiento se transforman en etilenourea.
¿Quién controla esto? ¿Quién es el poder? …
Mi gran preocupación cuando empiezo a hacer esta gira de A.O. es que aquí (Europa) se utilizan venenos que generan dioxinas.
La Universidad pasa esto por alto. Y es fácil entender por qué. Porque hoy, la Universidad no tiene compromiso, hoy la universidad tiene negocios. La Universidad no está comprometida con la sociedad. La Universidad es perversa. Allí se fabrican los intereses de la industria.
Ninguna profesión debe de provocar satisfacción para tratar de amortiguar la desgracia. La desgracia hay que evitarla. Una sociedad enferma no puede ser satisfacción de una medicina mercantilista. El cuerpo, la salud, la sociedad y la vida deben respetarse. No somos mercancía ni lo vamos a ser. Nosotros tenemos que salir de este mundo mercantilista. (…)
Los venenos que se usan en Ecuador, Colombia, de una u otra forma están siendo consumidos en Europa, ya sea que se consumen los alimentos que vienen de allí o porque se aplican aquí en las plantas, directamente. (…)
Los venenos fosforados que se usan en Europa, afectan directamente la capacidad del desarrollo intelectual de los niños. (…)
¿Hay hambre en el mundo? ¿Cómo puede existir hambre en el mundo si hay comida en los supermercados?
La palabra "hambre" es de manipulación política. ¡No hay hambre en el mundo! Actualmente hay comida para más de 12.000 millones de habitantes. Entonces, la gente no muere de hambre, a la gente la matan por falta de dinero y distribución de renta para comprar alimentos. ¡No hay hambre en el mundo! ¡A la gente la matan de hambre!
No podemos permitir esto. ¿Cuándo hay verdadera hambre? Cuando yo tenga dinero en el bolsillo y al ir a comprar no encuentro comida en el supermercado. Nos ponen cifras manipuladas y no somos capaces de interpretarlas. ¡No interpretamos!
Acabo de salir de la región de Lérida. Lérida tiene, aproximadamente, siete millones de cerdos. Si cada cerdo, de media, deposita cuatro Kilos de mierda por día, nosotros tenemos, en esa ciudad 28.000 toneladas de mierda por día.
La pregunta es, ¿por qué consumen fertilizantes químicos? Y el problema de la mierda es el dinero público que lo tiene que solucionar. Esa es la pregunta que tenemos que hacer.
Eso sin contar otros sistemas de explotación agropecuaria que hay, como pollos y gallinas, otros animales de engorde, la producción de leche,…
¿Por qué para solucionar el problema generado por la agroindustria de la fábrica de animales, se destina el dinero público? ¿Quién se queda con esta riqueza?
Hablaba con un productor de 1.200 cerdos y él me decía que era granjero: ¿Cómo  puede ser granjero una persona donde su territorio lo tiene ocupado por una instalaciones que las está pagando? ¿Cómo puede ser granjero una persona que no decide qué darles de comer a los cerdos, ni los cerdos son de él? ¿Cómo puede ser granjero una persona a la que le dan 10 euros por cada animal que sube al carro de la industria? ESo no puede ser un granjero. Es simplemente un operario disfrazado de granjero. Europa no tiene granjeros. Europa tiene esclavos y están miserables.
La comida, en Europa, está producida por miserables.
Aquí no hay comida, aquí hay miserables produciendo el desperdicio y consumismo de ustedes.
Hay que reflexionar sobre todo esto. Puedo ser un poco duro sobre la represión, pero no podemos dejar por menos porque la realidad no la puedo dejar por menos.
¿Qué comemos? ¿Cuánto veneno hay en el plato? ¿Cuánta deuda social hay en el plato? ¿Cuánta? ¿Le habrán pagado al campesino o al productor  aquello que está servido en el plato? ¿Cuánto de lo que hay en el plato le corresponde a una sociedad agraria, que realmente merece? (…)
El estómago lo domina una mafia agroalimentaria y eso lo tenemos que empezar a cuestionar.
Lo más grave de toda la situación: si esta señora (señalando su imagen en una diapositiva), por acaso, decidiera ir a comprar a este supermercado que está vendiendo comida orgánica las 24 horas del día, esta señora, no podrá entrar a comprar. ¿Por qué? Porque hay otra mafia que le cobra un peaje, el peaje de la certificación en la producción orgánica. Es una mafia, es un peaje. (Aplausos)
El alimento sano no puede estar certificado. Comer sano debe ser accesible en cualquier lugar. Esta mujer, con la limosna que le han dado, no podrá comer alimento orgánico. Porque el alimento orgánico, en el momento que está certificado, es un alimento que va a nutrir élites, que van a ser nuestro verdugos.
¡El alimento es para todos! Porque cuando el alimento no es para todos, no podemos hablar de una sociedad más justa y fraterna. Y eso es lo que queremos.
Una sociedad justa y fraterna se construye cuando hay accesibilidad a los alimentos, sin distinción.
Esa persona que no podrá pagar el alimento orgánico porque no le alcanza, tendrá una opción, así le dicen. Y es que tendrá que comer alimento barato, como es el alimento transgénico.
Está condenada más de la mitad de la población, en estos momentos, a comer soja transgénica. La soja no es un cultivo. La gente discute la soja como un cultivo. La soja es un imperio económico. Detrás de ella hay todo un paquete diferente.
Es muy barato producir soja transgénica. Son muy baratos los insumos de la soja transgénica, dentro del actual modelo agropecuario impuesto. Es un cultivo rentable para dominar la sociedad.
La soja transgénica es el alimento para pobres y el alimento orgánico para élites. Esto no lo podemos permitir.
 

 

 

 

 

2 comentarios:

  1. Muy claro, quien quiera ser feliz debera producir alimentos sanos. Muchas gracias por el aporte!

    ResponderEliminar