sábado, 28 de febrero de 2015

VOCABULARIO PARA BUENAS PRÁCTICAS

                                                                                                 (Tercera entrega)


BINAR, APORCAR O SAYAR, ESCARDAR.

 

Las plantitas, cuando se han transplantado a su lugar definitivo, hay que cuidarlas y protegerlas.
            Binar: consiste en romper la capa superficial del suelo, para que la tierra quede aireada  y de paso impedir el desarrollo de las "malas" hierbas.
            Escardar: consiste en controlar las "malas" hierbas.
            Aporcar o sayar: consiste en amontonar tierra alrededor de la planta que hemos transplantado. Con esta acción se consigue mullir la tierra que está alrededor de la planta.
            Para evitar que las "malas" hierbas nos dañen los cultivos hay que proceder con inteligencia y paciencia:
            Primero tendremos que preparar el terreno.
            No sembrar inmediatamente después de preparar el terreno, sino esperar unos días a que las "malas" hierbas empiecen a brotar; entonces pasaremos el rastrillo por el suelo.
            Esto bastará para destruirlas y para que no tomen la delantera al cultivo sembrado.
            Escardar o sayar en cuanto empiecen otra vez las "malas" hierbas a brotar.
            El cubrir con mulching limita mucho el desarrollo de las adventicias. Este proceso consiste en cubrir el suelo con una capa de materia vegetal.
            No hay que esperar a que las adventicias tengan semillas.
 
              * "malas hierbas": Usar este témino en agricultura ecológica es incorrecto, ya que cada planta que nace tiene una función. Otra cosa es que nos pueda perturbar en menor o mayor grado. Cuando uno ha entendido el papel que juegan todas las plantas de nuestra parcela, cambia su concepto de malo y lo transforma en colaborador, en aliado.
 
MÉTODOS DE LUCHA CONTRA LOS PARÁSITOS Y ENFERMEDADES.
La salud de las plantas está en función de si tienen o no cubiertas sus necesidades alimenticias. En la medida en que no tengan cubiertas completamente esas sus necesidades tendremos una planta con carencias y se mostrarán con alguna enfermedad o ataque de alguna plaga. Es fundamental, por lo tanto, que tengamos un suelo rico en nutrientes y sano. Así las plantas no necesitarán ningún tipo de aplicación para combatir ni plagas ni enfermedades.
Pero bueno es controlar los posibles métodos ecológicos que existen para que podamos aplicarlos a las plantas y cultivos de nuestra huerta en el caso en que se presenten los problemas.
 
Productos
 Los productos de la lucha contra los parásitos y enfermedades de la agricultura ecológica se reducen a los preparados con plantas y a los preparados con minerales.

Productos hechos con plantas


             Son numerosos y se utilizan los siguientes métodos: purín, infusión, decocción, maceración y extractos de flores.

E Purín: es la fermentación de las plantas. Se sumergen las plantas en agua durante cuatro días; este purín se utiliza contra varias especies de insectos, para reforzar la planta y estimular el crecimiento.

E Infusión: se vierte agua hirviendo sobre las plantas frescas o secas y se las deja en infusión durante 24 horas.

E Decocción: se ponen las plantas frescas o secas en remojo durante 24 horas. Después se las deja hervir durante 20 minutos. Se tapa el recipiente y se deja enfriar.

E Maceración: se ponen las plantas frescas o secas en agua, pero sin dejarlas fermentar. Como máximo se dejan tres días en agua, luego se filtran.

E Extracto de flores: se utilizan las flores, se humedecen y se trituran. La papilla extraída se mete en una bolsa de tela fina, que se presiona para extraer el líquido. Este extracto debe conservarse en botellas cerradas herméticamente. Para su utilización, añadir un poco de agua arcillosa para aumentar su adherencia o melaza.
                                                                                                       (continuará...)

viernes, 27 de febrero de 2015

CAMAS CALIENTES Y SEMILLEROS

                                                                                                           (Segunda entrega)
La cama caliente es un lugar especialmente preparado para que, en invierno, las plantas, a pesar del frío, puedan desarrollarse.
 
            Se realiza de la siguiente forma: se prepara un cajón con tablas, (el cajón no es absolutamente necesario). El ancho hay que procurar que sea suficiente para que se pueda trabajar en él con la mano. En el suelo o fondo del cajón se coloca una capa de unos 40 cm. de estiércol de caballo fresco mezclado con materia orgánica, y se recubre con una capa de tierra o mantillo tamizado, que es donde vamos a sembrar. Se cubre este cajón con una cristalera o plástico enmarcado en madera.
            En los primeros días puede alcanzar una temperatura de 60  o 70 grados. Para sembrar hay que esperar que baje la temperatura a 25º. Evitaremos su enfriamiento colocando alrededor estiércol de caballo y, por las noches, encima de la tapa, se pone una esterilla de paja. Cuando suba la temperatura se levantará la tapa, sobre todo si calienta el sol.
El semillero consiste en habilitar un lugar igual que en la cama caliente, pero por regla general no se calienta con estiércol de caballo.
No suele usarse tierra para sembrar las semillas. Salvo que esté esterilizada, cosa que se puede conseguir, pero es algo laborioso y complicado.
Lo mejor es utilizar, si se dispone de él, el compost que hayamos podido guardar en los últimos meses. Y la solución más práctica es la de comprar un saco de mezcla para planteles en algún almacén agrícola. Hay que pensar que no nos podemos jugar esta operación de siembra a la suerte. Tenemos que ir a lo seguro.
 
Recipientes para la siembra de semillas
 
  Bandejas y fuentes, cartones de leche, cartones de frutas, vasos de yougur, cacerolas. Cualquier recipiente que pueda albergar una cierta cantidad de sustrato, puede valer para hacer un semillero.

 

 

Todos ellos son buenos para la siembra de semillas y para el cultivo de varias plantas en grupo.
Los melones, calabazas, pepinos y calabacines deben sembrarse y cultivarse en recipientes individuales hasta el momento de ser trasplantados en el huerto. También es recomendable un recipiente para cada planta de tomate, bernjena y otras especies, sobre todo si se desea facilidad en el trasplante. Así, en ese momento, las plantas no experimetarán ningún contratiempo.
Si en el fondo de las bandejas alveoladas existe un agujerito es para que si las raíces de los planteles lo atraviesan, podamos podar esas raíces que se posan en el aire. Esta poda fomenta el crecimiento de las raíces laterales o de "alimentación" y no tarda en formarse una apretada red de robustas raíces en todo el compartimento.
El único inconveniente de las bandejas es que se secan muy deprisa y hay que vigilar el grado de humedad que tienen diariamente.
 
Las legumbres no necesitan ser sembradas en bandejas. Se hace directamente en el lugar que se destine para su cultivo en el huerto.

Este vídeo es bastante esclarecedor respecto al tema de hoy.

https://www.youtube.com/watch?v=gUU-atlN9JM

                                                                                                                  (continuará...)

jueves, 26 de febrero de 2015

CÓMO ORGANIZAR UN HUERTO

                                                                                         (Primera entrega)

Últimamente, muchas personas se están animando a cultivar una pequeña parcela de huerto, con el ánimo de cultivar algunas de las verduras que suelen consumir. ¡Muy loable empeño! Por mi parte les animo a que continúen en ese trayecto de ponerse en coctacto con la tierra.
También mucha gente se hace interrogantes acerca del método a seguir o de cómo plantar algunas semillas. Cierto es que existe mucha información al respecto en internet. Lo malo de la cuestión es que toda esa información está muy dispersa y a veces no del todo bien acertada. Porque hoy en día todo el mundo opina, y bien que lo haga, pero a veces, algunos pecan de ciertos defectillos rayando la imprudencia o la ignorancia.
Es por lo que, humildemente, con el afán de ayudar a los que puedan estar interesados, me atrevo a señalar algunas cuestiones básicas, reuniendo de forma algo sistematizada, esos conocimientos que de a poco y a lo largo de los años he podido aprender.

¿Cómo organizar un huerto?

Algunos factores a tener en cuenta.

     Naturaleza del suelo:
Los mejores suelos son aquellos que tienen un contenido medio de arcilla y un buen contenido de humus; han de ser profundos y bien drenados.
            La mejor orientación es la ESTE o la SUR.
            Hay que evitar las pendientes pronunciadas.
            Proteger el terreno con setos.


    Distribución del huerto: dividiremos el huerto en parcelas de 1,20 m. de ancho por 9 m. de largo. Los senderos entre las parcelas tendrán 35 cm. de ancho. Esta es una de tantas posibilidades como los bancales altos, bancales bajos, los surcos, ...
 
Factores ecológicos.
            El clima- La estación- La asociación de plantas- El abono- La influencia de los astros.
 Tres pilares del éxito: el trabajo del suelo, la rotación y la fertilización.
 ¿Cómo empezar a cultivar?
             Un terreno que ha estado sin cultivar durante años, o ha estado abonado con abonos químicos, no se transforma fácilmente en huerta fértil y ecológica.
            Para preparar la tierra tendremos que:
            Empezar en primavera, segando la hierba lo más cerca posible del suelo.
            En segundo lugar, daremos vuelta a la tierra enterrando la materia fresca.
            Después de desmenuzar lo mejor posible la tierra, sembraremos un abono verde, a ser posible que sea un buen desherbante (el alforfón o trigo sarraceno).
            Segaremos el abono verde cuando empiece a florecer y lo dejaremos sobre el terreno para que se pudra; más adelante lo enterraremos.
            Así el lugar quedará limpio de malas hierbas (de éstas, ya hablaremos) y estará mullido.
(Ésta no es la única manera de hacer las cosas, por lo tanto quedan otros caminos abiertos a la experimentación).
 
PRINCIPIOS DE LA FERTILIZACIÓN BIOLÓGICA
 De las materias orgánicas y minerales, seleccionaremos aquellas que en función de la naturaleza del suelo y de las posibilidades de aprovechamiento sean las más convenientes. Esto se hace según los principios siguientes:
" La materia orgánica fresca no debe enterrarse nunca en profundidad, debe descomponerse en montones o se dejará como cobertura hasta que se descomponga.
           "   El suelo no debe quedarse nunca desnudo, debe estar siempre cubierto por el cultivo que corresponda, por un abono verde, por una capa de hierba cortada,...
" Las aportaciones orgánicas deben ser lo más variadas posibles y nunca excesivas.
" Las aportaciones minerales serán sólo un complemento de las aportaciones orgánicas, dependiendo de las carencias que tenga el suelo.
 

TÉNICAS BÁSICAS DE LA FERTILIZACIÓN ECOLÓGICA

             En la naturaleza, la tierra nunca está desnuda, ya que una tierra desnuda muere progresivamente.
            Señalaremos diferentes tipos de cobertura del suelo.
            Ö   Cobertura vegetal viva: se logra con abonos verdes o con las mismas plantas cultivadas.
            Ö   Cobertura con materia vegetal verde cortada o “mulching”: puede tratarse de hierba verde cortada, un corte de abono verde o bien restos de cosechas que en cualquier caso cortaremos bastante menudos. El espesor de la capa de suelo deberá ser de unos 2 cm. y deberá estar bien aireada.
           Ö  Cobertura con compost: el compost puede utilizarse como cobertura todo el año, pero sobretodo es útil al principio de la primavera, y para la invernación del huerto en otoño.               
           Ö   Cobertura con paja y heno: la paja se descompone muy lentamente. Esta característica la convierte en cobertura ideal para protección del suelo y evitar la rápida evaporación del agua, sobretodo en verano y al mismo tiempo enriquece la tierra a medida que se va descomponiendo. El heno se descompone más rápidamente que la paja y tiene un valor fertilizante mayor.
                                           Continuará.... con "Camas calientes y semilleros"

miércoles, 18 de febrero de 2015

LUZ DE SOL INTERIOR PARA PLANTELES

Los planteles que están en el interior necesitan una gran cantidad de luz. Si solo tengo una ventana en esta habitación, van a crecer, llegado el momento, delgaduchas y muy largas.
Como tengo espacio en esta habitación, me busqué una puerta de las que tenía en la caseta antigua y la serruché un poco para cubrir la superficie deseada. Compré tres tubos fluorescentes de 1,20 m. 
Y con un poco de maña fui perforando los agujeros para las cuerdas que sujetarían la puerta y por los que pasarán los hilos de la luz.
Los tubos fluorescentes de luz blanca y fría son muy adecuados para los planteles de hortalizas.
Las luces fluorescentes conviene que estén separadas apenas entre 2,5 a 5 cm. de las pequeñas plantas. Conforme éstas vayan creciendo iré levantando un poco más las luces.





 
Las plantas de hortalizas cultivadas en casa deberían recibir de 12 a 16 horas de luz directa cada día. Las plantas deben dormir por lo menos 8 horas.
Como en los extremos suele haber menos luz que en el centro, rotaré las bandejas. Las de los extremos al centro y las del centro a los extremos. Cuidando de que todas las bandejas vayan cambiando de sitio. Estos cambios suelen hacerse una vez a la semana. Conforme crezcan las plantas iré aumentando la distancia entre la luz y ellas en 12 a 15 cm..
No hay que olvidarse el cuidado de la humedad de la tierra del semillero. Por eso hay que vigilar todos los días este particular. Un rociador de plantas o una botella de spray sirven estupendamente.
También es importante envolver las bandejas de semillas con un plástico negro hasta que broten las plantas. Ello favorece la germinación porque las plántulas buscarán la luz.
Como es natural, no hay que olvidarse de rotular las bandejas con algún sistema identificativo para no llevarnos alguna sorpresa con los cambaios de sitio.
Deseaba compartir esta mi experiencia por si alguien tiene ganas e interés por utilizarla. Un saludo para todos y todas las que se dedican al cuidado de las semillas.